¿Quiénes se conmueven con las películas sensibleras, se dejan llevar por la emoción hasta el grado de abrazar a perfectos desconocidos o se desmoronan ante una separación? La inesperada respuesta es: los hombres. Puede que sus estallidos de emoción se noten más en los estadios y también son ellos quienes casi siempre inician la ruptura de una relación amorosa, pero estudios recientes revelan que la vida emocional de los hombres es tan rica y compleja como la de las mujeres, sólo que suele resultarles un misterio a sí mismos y a sus parejas.
Las emociones siempre se han considerado un rasgo femenino, pero ellos las expresan con tanta frecuencia como ellas y describen sus experiencias sentimentales de modo parecido. En un análisis de la inteligencia emocional de 500,000 adultos, los hombres obtuvieron la misma puntuación que las mujeres en lo relativo a conciencia emocional. En estudios realizados con matrimonios, los maridos demostraron estar tan pendientes del estrés de sus parejas como ellas, y eran igualmente capaces de ofrecerles apoyo.
Así, hombres y mujeres ríen, lloran, suspiran y se enfurecen con la misma frecuencia, pero cada sexo vive y expresa sus emociones de manera distinta. "Para ellos están en segundo plano; para ellas en primero", explica el psicólogo Josh Coleman, autor de un libro sobre el tema. "La testosterona afecta los sentimientos de los hombres, que tienden a disociarlos y racionalizarlos más. Las mujeres parecen tener una conciencia natural de las emociones que los hombres sólo adquieren con esfuerzo. Pero cuando lo consiguen, los beneficios son enormes. Sus relaciones mejoran, y ellos son más felices".
